
Un juez de la República condenó a Martha Cecilia Álvarez Silva a 13 años de prisión por el delito de trata de personas, tras comprobarse que engañó y explotó sexualmente a una joven colombiana en Italia. La investigación de la Fiscalía General de la Nación permitió establecer que la procesada captaba mujeres en situación de vulnerabilidad en Pereira (Risaralda), bajo falsas promesas de empleo en el exterior.
Según el ente acusador, Álvarez Silva se acercaba a mujeres con dificultades económicas para ofrecerles supuestos trabajos en almacenes de ropa en la ciudad de Bari, Italia. A una de las víctimas, de 26 años y madre de dos hijos, le prometió cubrir los gastos del viaje, incluyendo los trámites de pasaporte, permisos consulares y tiquetes aéreos valorados en 10 millones de pesos. También le aseguró que tendría alojamiento, vestido y alimentación al llegar a territorio europeo.
Sin embargo, al arribar a Italia en septiembre de 2016, la mujer fue recibida por Álvarez Silva, quien de inmediato le retuvo el pasaporte y la trasladó a un hotel en Bari, donde le exigió ejercer actividades sexuales para pagar los supuestos costos del viaje. Durante su estadía, la víctima fue sometida a maltratos físicos y psicológicos, apenas se le permitía comer pan, agua y atún, y sus comunicaciones con la familia eran controladas.
El material probatorio presentado por la Fiscalía demostró que la joven estuvo bajo amenaza constante y que, tras una brutal agresión, estuvo a punto de perder la vida, siendo trasladada a un centro médico en estado grave. Allí logró recuperarse y denunciar los hechos, lo que permitió activar los mecanismos de cooperación judicial internacional y facilitar su retorno a Colombia en noviembre de 2016.
Como resultado del proceso, el juez no solo impuso la pena de prisión de 13 años, sino también una multa equivalente a 800 salarios mínimos legales mensuales vigentes y una inhabilidad para ejercer derechos y funciones públicas por 156 meses.
La sentencia condenatoria, dictada en primera instancia, representa un nuevo avance en la lucha contra la trata de personas, delito que continúa afectando a cientos de víctimas colombianas engañadas con promesas laborales en el exterior.