
Una nueva versión entregada por una residente del conjunto residencial Salitre Living podría aportar datos claves en la investigación por la muerte de la periodista Laura Camila Blanco, quien cayó desde un noveno piso la madrugada del pasado 27 de julio en la localidad de Barrios Unidos, Bogotá.
La vecina del edificio, quien pidió reserva de su identidad, relató que la noche anterior a la tragedia escuchó una discusión en la entrada del conjunto. “El sábado por la noche, alrededor de las 8 p. m., escuché una discusión entre un hombre y una mujer cerca de la recepción del edificio”, declaró al diario El Tiempo, añadiendo que la mujer “sollozaba, lo que indica que estaba llorando”.
Aunque no está confirmado que se tratara de Laura Camila y su pareja, la hora coincide con el momento en el que, según versiones previas, la joven habría salido con su novio hacia un restaurante en el norte de la ciudad para celebrar su grado.
Señales de una posible agresión
La familia de la comunicadora ha insistido en que la hipótesis principal no debe ser el suicidio, sino un posible feminicidio, debido a antecedentes de violencia en la relación sentimental de la joven. “Los vigilantes nos contaron que escucharon un escándalo, la pelea, la bulla”, dijo Jhoan Blanco, hermano de la periodista, quien también aseguró que el personal de seguridad evitó que el novio abandonara el lugar tras la caída.
El informe preliminar de la Policía Metropolitana señala que hubo una discusión en medio del “consumo de bebidas embriagantes”. Tras el incidente, Laura fue trasladada a un centro asistencial, donde falleció por la gravedad de las heridas.
Sospechas sobre la escena
La familia sostiene que el apartamento fue alterado antes de la llegada de las autoridades. “De acuerdo con las autoridades, quienes estaban ahí alteraron la escena. Ellos estaban tomando y cuando el CTI llegó todo estaba ordenado, no había botellas, la ventana estaba cerrada”, denunció la madre, Cecilia Osorio.
Dentro del apartamento, la habitación donde habría ocurrido la discusión presentaba varios indicios de alteración: la cama estaba desordenada, algunos cuadros en el suelo, el marco de la ventana roto y, según la madre, el novio de Laura había vomitado, lo que indicaría un posible estado de embriaguez. “Se evidencia que él estaba mal y ella lo ayudó”, añadió.
Investigación en curso
Hasta el momento, no se han realizado capturas. La Fiscalía continúa recopilando testimonios de testigos, vecinos y del personal de vigilancia, mientras la familia insiste en que la investigación debe avanzar con enfoque de género.
La muerte de Laura Camila ha generado conmoción en redes sociales y medios de comunicación, y ha motivado velatones y llamados públicos por justicia. La familia pide que se esclarezcan los hechos con transparencia y celeridad.